sábado, 27 de febrero de 2010

Los tiempos pasados no fueron mejores


Os sugiero leer con esta música, que también es un guiño a alguien que me lee desde bastante lejos.



Cinco años va hacer ya desde que el IES Ciudad Jardín empezó a funcionar. Mi hija mayor empezó la ESO al mismo tiempo y vivió aquel primer año complejo, horrible, que casi nos hace bajar los brazos. Fundamos la AMPA en la que fuí Vicepresidente, y nos pusimos manos a la obra junto con la dirección y la administración para cambiar un rumbo que no coincidía con el destino que, como comunidad educativa, queríamos para el IES.

Dejé la directiva de la AMPA con motivo del accidente de mi mujer, pero ahora la retomo como presidente. Con motivo de estos 5 años, me pide el periódico del IES que escriba a los alumnos, y os dejo aquí el mensaje que quiero enviarles, y decirles que es bueno saber de donde venimos, que la historia está para conocerla.

Badajoz, 20 de febrero de 2010.

El tiempo pasado no siempre fue mejor.

Y es que los inicios del IES Ciudad Jardín, antes IES nº12, fueron los que fueron. Nosotros, como padres, teníamos mucha ilusión porque nuestros hijos vinieran aquí, ya que se trataba de un instituto nuevo, bien dotado materialmente, al lado de casa y con nuevos profesores. Digamos que se daban todas las condiciones para que nos sintiéramos ilusionados con la elección que habíamos hecho juntos.

Y aquel curso nuevo comenzó y como padres no tardamos mucho en saber que algo no iba como esperábamos. Nuestros hijos, vosotros, nos contabais que no os sentíais a gusto, que las clases no iban bien, que había niños con comportamientos extraños que no estabais acostumbrados a ver. Que había profesores que no iban, que se daban de baja, aunque otros trataban de mantener a raya aquellos comportamientos tan alarmantes. Si hasta salimos en los periódicos y noticias locales, dónde algunos padres se dejaron llevar por el pánico y la alarma.

Sí, se requería que la comunidad educativa se organizará y el sentido común se impusiera, se requería que la administración fuera informada y actuase para que la mayoría de los alumnos, vosotros, tuvieseis aquello por lo que veníais al IES Ciudad Jardín.

Así surgió la AMPA, con más de 40 asociados que demandaban que actuásemos, que nos manifestásemos contra la administración para resolver los problemas. Pero los que en el aquel momento dirigíamos la AMPA pensábamos que la solución era entre todos y sin aspavientos, sin dañar la imagen del IES y en colaboración con profesores, administración y vosotros, permanentemente vosotros en el centro de nuestras preocupaciones.

Hablamos con la administración que nos reiteró que los recursos llegarían, y les hicimos saber que estaríamos allí para exigirlos, y hablamos con la dirección que nos dijo que su proyecto iba a seguir, y su compromiso, él de muchos profesores, se mantenía. Y echamos a andar todos juntos, bueno, algunos no querían ni andar, pero se fueron de aquí, y casi mejor. Pero los demás seguimos y nos dotamos de las herramientas para que el IES funcionase, como el Reglamento de Régimen Interior, en el que la AMPA aportó y mucho. Y vuestras caras eran otras, ya casi había normalidad en las clases, ya no estábamos en boca de todos, ni en las noticias locales, ya podíais aprender y estudiar.

Hoy estáis en un IES Ciudad Jardín como esperábamos, integrado en su entorno, donde la normalidad es lo frecuente, donde las iniciativas y las posibilidades son variadas: intercambios con otros países, sección bilingüe, proyectos Comenius, excursiones y viajes, periódico, alumnos distinguidos con premios, semana cultural, feria del libro y actividad académica normalizada y de calidad. Y con la primera promoción de bachilleres preparándose para la primera selectividad de alumnos de este IES, algo que vendrá a ser también normal.

Sí, los tiempos pasados no fueron mejores, hemos progresado mucho y sólo deseo, y para ello trabajaremos desde la AMPA, que dentro de unos años sigamos diciendo que los tiempos pasados siguen siendo peores. Hay algo que no cambiará, que el centro de nuestras preocupaciones, como padres, seguiréis siendo vosotros, los alumnos.

Francisco Centeno Velázquez,

Padre de dos alumnas del IES y Presidente del AMPA

domingo, 21 de febrero de 2010

Reparto del trabajo


Escribe Guillermo Fernández Vara en su blog sobre la medida de reducción del 30% de los altos cargos de la Junta de Extremadura y de que es una medida que puede tener poca trascendencia en el montante global de reducción de gastos, ya que no significa tanto en términos económicos.

Y en nuestras conversaciones durante las comidas en Servicios Centrales de la UEX y en el blog de Guillermo, Juan Antonio Doncel ya ha propuesto varias veces este tema, que quizás sería bueno aplicar el concepto de reparto del trabajo en los tiempos difíciles que vivimos.

No sería nada banal disminuir un 25% las horas de trabajo, pasar de 8 a 6 horas, con las consiguientes reducciones de sueldo y de cotización a la Seguridad Social. De esta manera, cada tres trabajadores que así lo hiciéramos generaríamos un cuarto puesto de trabajo con el mismo sueldo y cotización. En realidad no es una generación de puestos de trabajo, ya que no son puestos nuevos, pero sí tendría como consecuencia una disminución de los gastos públicos derivados de ayudas y subsidios de los desempleados que se beneficiaran de esta ayuda, con la consiguiente disminución de la deuda, tan necesaria en los tiempos de crisis que vivimos. Si los aproximadamente 6 millones de funcionarios nos acogiésemos a esta medida, nos encontraríamos que dos millones más podrían trabajar. Y serían más si el sector privado se acogiera a ella. Esto sí significaría una disminución importante en los gastos del estado y un beneficio significativo para todos como colectividad.

Pero..., siempre hay peros, individualmente esta medida es un sacrificio, y lo es porque en ese estado del bienestar que nos han transmitido, hemos identificado bienestar con tener más de todo: más dinero, más consumo, más propiedades, más beneficios materiales, y hemos organizado nuestras vidas alrededor de ello, viviendo, en muchos casos, por encima de nuestras posibilidades. Y esta medida supone una bajada de sueldo, algo contrario al malentendido estado del bienestar consumista. Pero también, lo que sí supone esta medida es que el tiempo diario que dedicaríamos al trabajo es sólo 1/4 de los días laborables, y no ese 1/3 que dedicamos ahora. Y tendríamos más tiempo para nuestra familia, los hijos, el ocio, la lectura, la cultura o la UNED, por poner ejemplos. Y tendríamos para reflexionar en qué mundo queremos y si bienestar significa sólo poseer más.

Sin duda que sería una medida que requiere reformas y sacrificios pero es tiempo de hacerlas y sacrificarse. Y quizás, inicialmente, de manera voluntaria y temporal, pero si el devenir la hace atractiva, puede ser definitiva. Quién sabe.

PD: gracias a todos por el interés en mi padre, ya va mejor y en casa.