viernes, 31 de julio de 2009

De líderes y liderazgo



Hemos asistido, en el pasado Tour de Francia, a la clásica lucha entre líderes por la sucesión. Mientras Lance Armstrong ya había sido líder del equipo, Alberto Contador no se había consolidado como tal, aún siendo el líder natural de su equipo. El desequilibrio entre ambos viene por la postura del director deportivo del Astana, que se decidió por el viejo líder y arrastró el apoyo de parte del equipo hacia Lance. Una prueba objetiva, el Tour, recorrer en el menor tiempo la misma distancia, ha puesto al líder natural (Contador) y ha desestimado al viejo líder (Armstrong).

Mariano Rajoy se ha mostrado como el líder designado, y pese al último Congreso de su partido que le nombró presidente por mayoría, sigue comportándose como aquél que no tiene los apoyos suficientes para hacer aquello que realmente piensa, al menos a mí me lo parece, sobre todo con el tema de Bárcenas y probablemente con el de Camps. Y la prueba la tenemos en el análisis cuidadoso de los últimos resultados de la última encuesta del CIS, que muestra cómo es mal valorado por sus militantes y hasta por sus votantes. Es decir, que un líder natural en el PP probablemente hubiera sacado más diferencia frente al desgaste que la crisis y algunos de sus errores de gobierno ejerce sobre Zapatero. Y hay que tener en cuenta que las elecciones europeas les ha subido la moral. No hace falta ser un lince para ver que si desde la izquierda fuésemos capaces de volver a ilusionar a nuestro electorado, el PP de Rajoy no ganará las elecciones porque no le consideran como líder.

Llegados a este punto, cabe preguntarse por los líderes naturales, por los recambios de Rajoy. Doña Esperanza Aguirre está atenta a todo, representa, sin ambages ni tapujos, los valores de la derecha clásica y ultraliberal, y tiene claro que su momento está por llegar pronto o no lo tendrá. Es la líder natural, la que reconoce una parte importante del partido y la que representa el relevo de los valores que Aznar aplicó durante su etapa de gobierno. Y estos fieles apoyos (sobre todo en Madrid) sólo se olvidarían de ella (de Esperanza) ante la vuelta de Aznar, aunque fuese en forma de Botella.

¿Y alguien sabe dónde anda el otro líder?. Sí, hablo de Alberto Rúiz Gallardón, que con la escusa de la candidatura de Madrid para el 2016, se quita del medio en tiempos turbios, para que los remolinos del caso Gürtel en Madrid, en Valencia y en el seno de su partido, no le afecten ni dañen su inmaculada imagen. Y no nos olvidemos del espionaje en el PP de Madrid, tan cercano y tan dejado por él en manos de su Vicealcalde. Sí, parece que se prepara como alternativa.

Necesitan una prueba objetiva para tener líder, pero como esperen a las elecciones generales...

miércoles, 29 de julio de 2009

Con la Guardia Civil



Hoy soy de la Guardia Civil.
Siempre seré "hijo del cuerpo".

Y seguiré siéndolo. No acabaréis con nosotros.

jueves, 23 de julio de 2009

Rebajas en las cuotas


Y siguiendo con el anterior comentario, ya veis, los empresarios no están de acuerdo con un pacto social en época de crisis. Ellos prefieren aprovechar este momento delicado para presionar y eliminar aquello en lo que no creen, disminuir en lo posible la parte de sus beneficios que va a la caja única y de todos, a la seguridad social.

Entendamos que es su posición, perfectamente lícita, a la que el gobierno ya cedió en parte, una rebaja del 1,5 %. Y que pretenden llegar al 5%. Pues yo trataría de hacerles ver que hay una posibilidad de llegar a ese 5 %, y que esa posibilidad sería por objetivos que se marcarían. Es decir, que no todos los empresarios tendrían las mismas rebajas a las que tendrían que acceder por objetivos conseguidos, y que esos objetivos fuesen unos de formación y otros con clara vocación social.

Por ejemplo, un 0,5 % adicional de rebaja a todos aquellos empresarios con más de X número de trabajadores que implantasen una guardería en sus empresas y que hiciera más fácil y compatible la vida familiar y laboral. Se premiarían también que varias empresas se uniesen para participar conjuntamente en generar guarderías.

Y otro 1 % adicional de rebaja en las cuotas a la seguridad social a todas aquellas empresas y empresarios que implantasen sistemas de seguridad laboral más allá de los mínimos marcados por la ley, y que condujesen a una disminución de los accidentes laborales.

Y otro 0,5 % si realizan cursos de formación, y así rebajamos la obligatoriedad a los incentivos positivos, que es lo que se recomienda para un aprendizaje correcto. En honor a jlrz, que no deja de tener razón.

Hay margen hasta el 5 %. Y es más, comparto con ellos que hay que hacer una reforma laboral profunda, pero empezando por ellos, que son parte del sistema laboral. Ya es hora que se adapten.

martes, 14 de julio de 2009

Formación empresarial, hacía un cambio

Estoy atento y expectante a las reuniones que tienen lugar estos días entre los agentes sociales y el gobierno encaminadas a obtener un pacto social para los próximos años. Lo estoy por varias razones. Una es que son tiempos complicados que suelen incitar a la agitación social porque las posiciones se radicalizan. Lo que menos nos conviene ahora es tener un panorama laboral y social convulso, con huelgas a la desesperada y con acciones que lleven a las partes a posiciones extremas. Hemos vivido ya las consecuencias de estos periodos y el más reciente, de entre los intensos, es él que vivimos en la primera mitad de los 80, con las reformas que los gobiernos de Felipe González abordaron en los astilleros, la minería, etc. En aquellas reconversiones, y en otras posteriores, siempre se exigió un esfuerzo importante a la clase trabajadora para reubicarla en otros sectores productivos, y se les pidió un esfuerzo adicional de formación encaminado a dotarles de los conocimientos necesarios para poder trabajar en nuevos sectores productivos. Y así se hizo, para beneficio de los empresarios, de los trabajadores y de la sociedad en general, eso sí, con el esfuerzo de los trabajadores.


Ahora se propone la transición a un modelo productivo basado en la innovación, en la generación de conocimiento y en la investigación. Y me pregunto si nuestra clase empresarial está preparada, me pregunto si tiene la formación adecuada para liderar esta transición. Sin ánimo de generalizar, y con las limitaciones que mi visión funcionarial aporta, creo que en España la clase empresarial media-pequeña está formada por empresarios mayoritariamente autodidactas, de empresa familiar, que aprendieron la gestión casi de padres a hijos, con sus defectos y algunas de sus virtudes. Dudo que esta clase empresarial, acostumbrada a buscar los beneficios en los entresijos de las cuotas a la seguridad social, la facturación olvidada, la seguridad en el trabajo como asignatura pendiente o los contratos a tiempo parcial pero de trabajo a tiempo completo, pueda impulsar la transformación de nuestra economía. Y el gran empresario español es aquel de grandes éxitos medidos sólo por sus beneficios, algunos encumbrados para luego acabar en la cárcel, de poder mediático pero que lideran empresas donde el Departamento de I+D+I brilla por su ausencia.

Por tanto, creo que llega el momento de que otros se sumen al esfuerzo y propongo que en ese pacto social se incluya, por primera vez, la obligatoriedad de la formación empresarial, con cursos de formación en pagos a la seguridad social, facturación sin doble contabilidad, formas de contratación a tiempo completo, inversión en seguridad en el trabajo y bienestar del trabajador, y cómo invertir en progreso no inmediato pero sólido: creación de departamentos de I+D+I.

Ya sé que nadie me escucha, pero y si esta vez sí.

domingo, 12 de julio de 2009

Un año


Sí, mañana cumple un año este blog. La experiencia es muy positiva y satisfactoria.
Pero lo que quiero es agradeceros vuestra fidelidad, aún cuando he estado periodos sin escribir, y sobre todo vuestra honestidad al expresaros aquí.
Gracias también a los que leen pero no escriben, vosotros también sois importantes.
Un saludo

miércoles, 8 de julio de 2009

Memoria histórica y silencios


Qué no seríamos capaces de hacer por nuestra familia, y más en una sociedad que gira en torno a la muerte y sus muertos. Al menos por decencia, demos sepultura a aquellos que murieron defendiendo la democracia.

Pero la memoria también nos es necesaria para escribir la historia frente a aquellos que tratan de reescribirla, frente a los Cesar Vidal y los Pio Moa que retuercen la historia para llevarlas hacia sus estrafalarias ideas. Frente a estos manipuladores del pensamiento no valen ni los silencios ni la ocultación.

Yo también estuve en Alburquerque en esas primeras jornadas sobre la Memoria Histórica en Extremadura y me emocioné con las vivencias de los que tras 73 años aun buscan a sus familiares.

Os dejo con la introducción que mi primo hizo en uno de los debates que coordinó. Creo que expresa bien lo que pienso.

La resolución aprobada por el pasado 37 Congreso Federal del PSOE, dentro del apartado denominado Nuevas Políticas e Instituciones para una Sociedad en Igualdad dice con respecto a la Memoria Histórica : “Más democracia significa también mejor convivencia. Porque España es, sobre todo, para nosotros y nosotras, los ciudadanos y las ciudadanas que la viven, la trabajan y la conforman. De ahí que, por encima de cualquier otra cosa, busquemos la convivencia entre toda la ciudadanía; la convivencia segura, pacífica y tolerante entre todos los ciudadanos que habitan en España; la participación de todos y todas, a partir del respeto y fomento a nuestro pluralismo ideológico, religioso, cultural, territorial ... en nuestro proyecto común de convivencia, que lo enriquece profundamente. Si democracia es convivencia, también es respeto hacia las leyes, al derecho de ser amparado por éstas. En este sentido, y habiéndose aprobado durante la anterior legislatura la Ley por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la Dictadura, los socialistas reclamamos la necesidad del desarrollo progresivo de esta Ley en un marco de recuperado consenso sobre una materia que no debe ser motivo de división entre los españoles, sino todo lo contrario”

Nuestro Gobierno alega, frente a las críticas impulsadas desde la derecha y sus medios afines, que es necesario recordar para no volver a cometer los mismos errores, y argumenta que la oposición no entiende que esta Ley pueda no reavivar viejas rencillas, sino cicatrizar las heridas de una gran parte de españoles que tienen que cargar con el olvido y con la humillación que supuso la derrota y la posterior represión.

Debemos los socialistas, por tanto, ser conscientes que todo lo que hagamos, por insignificante que parezca, será un inicio, un preámbulo para satisfacer las ansias de justicia, dignidad y reparación. Que todo lo que hagamos por honrar a nuestras víctimas y familiares será escaso en comparación con su esfuerzo y su sacrificio, pero, igualmente, que por poco que avancemos, les parecerá mucho a ellos, acostumbrados a décadas de silencio y olvido.

Hemos de tener como uno de nuestros objetivos el conseguir que la Memoria Histórica se convierta en una verdadera seña de identidad de la militancia por el componente ideológico y sentimental que su conocimiento conlleva, al tratarse, fundamentalmente de restituir la dignidad de los represaliados durante la guerra civil y la dictadura franquista, socialistas en su mayor parte.

Sabemos, no obstante, que estamos tratando un asunto complicado y delicado que debe abordarse de forma exquisita y clarividente, sin perder de vista que nuestro objetivo final no es otro que el de restablecer la dignidad y la justicia, fomentando la convivencia ante todo, pero dejando clara nuestra postura como socialistas que no es otra que asentar los valores que nos inspiran sobre el conocimiento, no sobre el olvido ni la impunidad.

Estimamos que el debate que se encuentra abierto en la sociedad española no es contraproducente, sino esclarecedor. No debemos tener reparos en afrontarlo con valentía y audacia, sin complejos, pues mediante el mismo tenemos ganada la batalla moral y partimos con la ventaja de marcar los tiempos de la iniciativa política.

Los socialistas hemos de asumir todos los días del año, no sólo en una fecha concreta, que la bandera del recuerdo debe sobreponerse a la del olvido y la amnesia. Sin complejos y de forma decidida, hemos de reivindicar como nuestros a los que en aquellos fatídicos años dieron su vida por la defensa de los mismos ideales que a sus herederos, nosotros, muchas décadas después, nos reconfortan, impulsan y guían.

Abordemos, pues, este delicado tema desde un punto de vista ético, comprometido y sin tibieza ni ambigüedades, y no sólo desde una óptica meramente estética y formal. Se lo debemos, entre otros, a Sinforiano Madroñero, Nicolás de Pablo, López Alegría José González Barrero, Méndez Lemus y a tantos cientos y miles de compañeros/as anónimos asesinados por pensar como mis ascendientes Enrique Velázquez, Anacleto Moro, Alfonso Bohoyo y Antonio Bohoyo. También se lo debemos a Isidoro Bohoyo, mi querido abuelo paterno, fuente limpia y pura de la que manaba el socialismo que bebí.


Un saludo y ya estoy de vuelta