viernes, 4 de diciembre de 2009

Vaya con los cambios

En el Ministerio de Ciencia e Innovación se han producido cambios en la Dirección General de Investigación. Carlos Martínez, investigador de fama nacional e internacional, que fuera Director del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha sido cesado.

Carlos tiene una reputación de duro como director de proyectos y de su grupo de investigación, pero es un investigador nato. Conoce la investigación y sus entresijos, conoce la gestión de la investigación a altos niveles, incluso internacionales, y es un defensor de la carrera investigadora. Quizás menosprecia la investigación que hacemos en las universidades, mas por proceder del consejo que por el conocimiento que de ella tenga, pero en definitiva es un investigador.


Dicen que las desavenencias con la Ministra Garmendia son ahora grandes, cuando en los inicios fueron de luna de miel. Dicen que estas diferencias empezaron a ser visibles con los presupuestos y la tibia defensa que la Ministra hacía, en el Consejo de Ministros , frente a los recortes planificados para su ministerio, y los recortes en I+D+i llegaron. Pero también dicen que a Carlos Martínez no le gusta cómo está funcionando el Ministerio. A mí tampoco, no cubre las expectativas, creo que por la ministra, y menos mal que las competencias de Universidad se las quitaron y se las dieron al ministerio de Gabilondo.

El relevo es un hombre que fue Rector en Zaragoza, Felipe Pétriz, más dedicado a la política y gestión universitaria que a las tareas investigadoras, en las que destaca su labor de trabajo en colaboración con empresas.

Y es que parece que detrás de las desavenencias entre Carlos Martínez y Cristina Garmendia, lo que subyace es la vieja batalla entre investigación básica e investigación aplicada. Y sin la primera, nos vamos a dar de morros tratando de hacer la segunda sin los fundamentos básicos y sin las estructuras que alimentan a la investigación aplicada. Espero confundirme...

13 comentarios:

Hitos dijo...

¿Un cambio a peor? ¿Un cambio para que no haya fisuras dentro del ministerio? ¿Un cambio cómodo?

En estas cosas me tengo que dejar guiar por lo que cuentas, no tengo conocimientos para sacar conclusiones solita.

Lo malo es que me da la impresión de poca cintura.

Si es un lince el que regenta el ministerio, no es necesaria mucha cintura, con que tenga las ideas claras y sean buenas... lo malo es si el cabecilla (en este caso la cabecilla pensante) no sabe para el lao que está canteá.

Sostiene Grueso dijo...

Otra mala noticia para la investigación en España, me temo.

Amigo de la Dialéctica dijo...

Hola amigo:

Seguimos fallando en lo de siempre, falta interacción, falta empatía y falta mucha afectividad. Se carece de una visión holística y siempre se termina perjudicando a alguien. La vida, los seres humanos, somos como un puzle; aquí no sobra ninguna pieza. O encajan todas las piezas o no habremos completado el puzle.

Recibe un muy fuerte abrazote amigo.

ID dijo...

Es una pena que a Garmendia le toque lidiar en fase de vacas flacas.

Es ley universal, creo, en periodo de vacas flacas lo que más se resiente es la inversión, especialmente la inmaterial, dicho en plata, la innovación y la investigación. Toca sacar renta en el corto plazo. En esas condiciones es una fantasía fantástica pretender mantener los niveles presupuestarios de las épocas de vacas gordas.

Por otro lado, tampoco creo que los poderes públicos estén para fomentar la investigación por simple admiración al ejercicio del oficio, sino principalmente por sus efectos en el progreso económico, social y de bienestar de los ciudadanos, es por ello que en todo el mundo se prima la investigación aplicada, imbricada en la cooperación entre centros de investigación y empresas u otros organismos interesados (generalmente públicos) antes que la investigación básica genérica, muy digna por supuesto, pero sólo indispensable si demuestra un nivel de excelencia muy especial, insisto en periodo de vacas flacas.

Por todo ello creo que el perfil de investigador en puestos de gestión de la investigación no me parece idóneo, ni de lejos. Zapatero a tus zapatos.

Juan Antonio Doncel Luengo dijo...

Intervengo para manifestar que, a tenor de lo leído en este post y sus comentarios, las espadas están en alto, el debate es de altura. Si la investigación necesita más o igual de dinero, no hay por qué pensar que un investigador conseguirá más que un no investigador. Pero sí, esa diferencia entre básica y aplicada puede discutirse, puesto que ambas ocurren a la vez. En todo caso, siempre que hay menos dinero y alguien se opone a que se reduzca en algún capítulo me gustaría que me dijera en qué se reduciría en vez de en ese capítulo.

Hitos dijo...

Yo me pierdo entre básica y aplicada ¿es por la participación de empresas privadas? ¿no participan en las dos?

Paco Centeno dijo...

Pues la investigación básica y aplicada son dependientes entre sí, y no imagináis cómo. Un símil nos debería a ayudar a entender este debate. De un iceberg conocemos lo que asoma fuera del agua (la investigación aplicada), pero esa parte se sustenta sobre una gran base de hielo (la básica) que supera con mucho la que emerge fuera del agua y que no es visible para la mayoría, de hecho, a veces sólo es visible para los expertos.

Y como en un iceberg, cuanto más y mejor sea esa básica, más y mejor investigación aplicada emerge.

El problema es tratar de hacer emerger más de lo que la investigación básica que hacemos puede soportar, entonces, el iceberg puede hundirse y no veríamos la aplicada.

Y la reducción en el presupuesto de I+D+i es en la parte básica, por tanto, se trata de potenciar la investigación aplicada a costa de, insisto, a costa de disminuir la investigación básica, y eso es un "iceberg" insostenible, más aún en época de crisis.

Por eso creo que fue un error la planificación del recorte, con la connivencia de la ministra. Y por eso creo que Carlos Martínez decidió dejar este barco. Considero que es una importante pérdida, más que por la persona en sí, porque él era el asidero de Cristina con la investigación e investigadores básicos. Y ahora tenemos un "iceberg" con la cabeza y base separadas.

Espero, de verdad, confundirme.

Paco Centeno dijo...

ID, no creo que por ser investigador no se pueda ser un buen gestor. Entiendo que no es un axioma correcto. En este sentido, mientras Carlos Martínez había hecho una gestión muy buena en el CNB (Centro Nacional de Biotecnología), poniendo a este centro en las cotas más altas del CSIC, y que le merecieron la dirección del mismísimo Consejo, y todo ello sin disminuir su rendimiento como científico, recogido en las revistas del campo, Cristina Garmendia no ha conseguido hacer arrancar el Ministerio estrella de Zapatero, y lo digo con pena porque yo también creo que nos hace mucha falta. Y es que gestionar recursos y políticas no está al alcance de todos. Es mi opinión que intenté fundamentar en datos.

Rosa dijo...

Hasta que uno no sienta la verdadera alegría de Navidad no existe. Todo lo demás es apariencia muchos adornos, porque no son los adornos, no es la nieve, no es el árbol, ni la chimenea.
La Navidad es el calor que vuelve al corazón de las personas, la generosidad de compartirla con otros y la esperanza de seguir adelante.

FELIZ NAVIDAD AMIGOS,
Un besito Rosa

Malo Malísimo dijo...

Cuando los Aztecas o los Egipcios levantaron sus pirámides lo que puieron debajo fue la base, no la cuspide.
Creo que he sido lo suficientemente claro y conciso

Malo Malísimo dijo...

Cuando los Aztecas o los Egipcios levantaron sus pirámides lo que puieron debajo fue la base, no la cuspide.
Creo que he sido lo suficientemente claro y conciso

ID dijo...

Las figuras retóricas del iceberg o las pirámides resultan sugestivas pero no pasan de ser declarativas, no ofrecen ningún argumento adicional.

Paco Centeno dijo...

ID, no son retóricas, son analogías de un argumento, que la investigación aplicada se sostiene en la básica. Por tanto, en tiempos difíciles veo más sensato, en el largo plazo, seguir manteniendo la básica y reducir la aplicada. Incrementar la aplicada reduciendo la básica es crear un sistema de I+D+i con pies de barro. A corto plazo puede ser muy efectista, pero a largo plazo crea un sistema endeble, insostenible.

A ello sumo un argumento histórico, que nuestra investigación, la básica y la aplicada, llevan muchos años con inversiones un 50% inferiores a las inversiones de otros países de nuestro entorno próximo. Y aunque hemos avanzado mucho con los gobiernos de ZP en el PIB dedicado a la I+D+i, seguimos teniendo un instrumento frágil. Por eso, su permanencia en el tiempo es más dependiente de la base que de lo visible.